Jorge Juan Nácher, conocido como Pitty, está en prisión provisional, comunicada y sin fianza, a la espera de juicio La investigación policial apunta al menos a cinco víctimas de abusos
Entrenador de fútbol, monitor de gimnasio, amigo de los niños y persona que se ganaba la confianza tanto de los menores como de sus padres. Todavía no me lo puedo creer. Ese es el perfil del hombre de 30 años acusado de abusar sexualmente de al menos cinco menores de edad en la comarca de La Safor, en Valencia. Jorge Juan Nácher, conocido como Pitty, es un joven de Gandía, deportista, divertido, carismático y muy introducido en el ambiente del deporte base de su comarca. Después de haber jugado en diversos equipos de fútbol, se dedicó a entrenar a equipos de fútbol base, es decir, de niños, durante los últimos años.
Jorge Ha entrenado a equipos desde categoría prebenjamín, niños entre 6 y 7 años, cadete, entre 14 y 15, así como en otras categorías todas ellas de niños menores de edad, además de haber asumido cargos de responsabilidad deportiva en diversos clubes de la comarca. Pitty, como es conocido en su ambiente, está acostumbrado a relacionarse con niños de distintas edades, convirtiéndose en una persona que comparte mucho tiempo con ellos, una especie de hermano mayor, de confidente y amigo adulto, una referencia cercana de los menores que consigue, poco a poco, ganarse su confianza y erigirse en alguien que cuenta con la capacidad de influir sobre ellos. Pasado un tiempo en el mundo del fútbol base en el que, recordemos, llegó a asumir cargos de relativa responsabilidad en determinados clubes, dejó de entrenar a niños.
Lo hizo repentinamente y, al parecer, después de ser apartado del último equipo en el que entrenó hace algunos meses. Desde ese momento, Jorge se centró en su otra actividad, la relativa a los gimnasios como entrenador personal a través de su marca, DoloFit. Después de haber abandonado el mundo de la formación de niños en el fútbol base, aparentemente sin motivo o simplemente para centrase en ser entrenador personal, parece que existían otros motivos que le llevaron a alejarse de los menores. Unos motivos que han terminado por dar con Jorge en la cárcel, esperando ser juzgado por abuso de menores entre otros delitos que podría haber cometido.
Los niños son impresionables e influenciables, una circunstancia que Pitty podría haber aprovechado, junto a la estrecha relación que le unía con ellos, para mantener relaciones sexuales con al menos cinco chicos de entre 16 y 17 años. Jorge Juan Nácher, al que conocían, su amigo, aquel entrenador que tanto apreciaban, sería el responsable de la pesadilla de esos muchachos que difícilmente olvidarán y quién sabe si superarán algún día. Las circunstancias que rodean a este caso son todavía un misterio, puesto que la investigación continúa abierta, pero según ha trascendido, la operación policial comenzó cuando la madre de uno de los afectados presentó una denuncia ante la Policía Nacional. La madre, al parecer, se percató de comportamientos extraños de su hijo y consiguió averiguar qué es lo que sucedía. Al conocer que su hijo podría haber sido víctima de una circunstancia tan grave, no dudó en acudir a las dependencias policiales para poner en aviso a las autoridades. La Policía Nacional, al ser conocedora de la denuncia presentada por la madre, comenzó una investigación que se centró en conocer el entorno de Pitty, para tratar tanto de esclarecer los hechos como de conocer posibles nuevas víctimas.
Todo empezó tomando declaración al menor cuya madre denunció los hechos. El muchacho relató su experiencia a agentes especializados de la Policía, fruto de lo cual se pudo establecerse una lista mayor de nombres de otros menores que podrían haber estado sufriendo abusos de índole sexual. Ampliada la
lista de menores que podrían estar en idéntica situación del denunciante, se procedió a implementar el protocolo de investigación acorde a dicha situación, ante lo que los agentes destinados al caso
conformaron una lista de chicos a los que fueron tomando declaración para tratar de esclarecer los hechos. Los resultados de la investigación fueron concluyentes: al menos cinco menores, de entre 16 y 17 años, podrían haber sufrido abusos sexuales, ser expuestos a un caso de corrupción de menores o prostituidos por parte de Jorge Juan Nácher.
Según apuntan los indicios, Pitty podría haber comprado el silencio de los niños con regalos e incluso con dinero, demostrando pocos escrúpulos para mantenerse a salvo y lejos de una investigación policial. La investigación sobre este presunto caso de corrupción de menores y prostitución, llega a añadir el cargo de agresión sexual debido a que, probablemente, al menos uno de los cinco menores, fue forzado contra su voluntad a mantener relaciones sexuales con quien había sido su entrenador. Concluida la primera fase de la investigación todo fue muy rápido.
El pasado miércoles 4 de mayo, Pitty fue detenido en el gimnasio donde trabajaba como monitor, ante la sorpresa del personal del mismo no nos lo creemos todavía, estamos en estado de shock. A partir de ahí, el siguiente paso consistía en la entrada y registro del domicilio del ahora encarcelado y lo que allí encontraron podría ser determinante para la investigación.En casa de Jorge Juan Nácher, Pitty, según la investigación, la Policía Nacional habría encontrado abundante material audiovisual de carácter pornográfico, tanto fotografías como vídeos, entre los que se podrían encontrar grabaciones de los encuentros sexuales con los menores objeto de la investigación en curso. Al parecer, Pitty no se le limitaba a mantener relaciones sexuales con esos menores, llegando a agredir sexualmente al menos a uno de ellos, sino que podría haberlas grabado, sin que haya trascendido de momento, si las grababa con algún fin concreto, de intercambio, para guardar un trofeo de dichas relaciones o por cualquier otro motivo.
No se descarta que el acusado pudiera haberse lucrado con la venta de ese material pedófilo. Jorge Juan Nácher fue puesto a disposición judicial, tras lo que se decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza a la espera de que la investigación continúe aclarando qué ha pasado durante los últimos años y qué más delitos podría haber cometido el acusado para poder ser juzgado por todos ellos.
Los trabajadores del gimnasio donde ejercía como entrenador personal, así como el resto de personas que han compartido vida personal o profesional con Pitty no salen de su asombro, mientras los familiares de los niños a los que ha entrenado a lo largo de los años, esperan, intranquilos, preocupados y llenos de dudas, que termine la investigación y tener la certeza de sus hijos fueron, o no, víctimas de un pedófilo sin escrúpulos.
Es para comérselos, no?
Esta es la foto que Pitty, encarcelado a la espera de juicio acusado de corrupción de menores, agresión sexual y prostitución, colgó en la conocida red social Twitter. Se le puede ver en el vestuario con unos niños a los que entrenaba, con un comentario que entonces no pareció sospechoso pero que ahora hace saltar todas las alarmas: es para comérselos, no?.
Pitty es muy conocido en el mundo del fútbol base en La Safor
Jorge Juan Nácher, conocido como Pitty, es un nombre conocido en el mundo del fútbol base en la comarca de La Safor. Las localidades cercanas a Gandía han visto como jugó en diversos equipos, además de haber entrenado niños de diversas categorías, asumiendo en ocasiones cargos de responsabilidad en clubes de la comarca.
DoloFit, la marca de Jorge Juan Nácher como entrenador personal
Pitty compaginaba sus actividades con los menores en distintas escuelas y clubes de fútbol con su papel de entrenador personal, lo hacía a través de una marca, DoloFit, que cuenta incluso con un canal en youtube donde podemos ver al ahora encarcelado dirigiendo entrenamientos
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